El presidente Trump ha reunido un nuevo equipo legal para preparar su defensa en el juicio político del Senado que se llevará a cabo la próxima semana, luego de que dimitieran cinco integrantes de su anterior equipo. Trump contrató a Bruce Castor, un exfiscal de distrito del estado de Pensilvania que en 2005 decidió no imputar a Bill Cosby después de que Andrea Constand lo acusara de drogarla y agredirla sexualmente. Cosby fue condenado por ese crimen en 2018. Otro de los abogados contratados por Trump, David Schoen, ha representado a su aliado Roger Stone, así como a jefes de la mafia rusa e italiana. Schoen se reunió con el agresor sexual condenado Jeffrey Epstein unos días antes de que Epstein muriera en la cárcel.