David Murcia Guzmán, accionista mayoritario de la captadora de dinero DMG, intervenida hace 15 años por la Superintendencia de Sociedades, anunció en entrevista con La Nueva Prensa, que, cuando tenga las seguridades estatales necesarias, revelará el verdadero papel que tuvo en ese caso el abogado Abelardo de la Espriella.

Murcia concedió desde la cárcel una entrevista de una hora al periodista Gonzalo Guillén en la que hizo reparos a la liquidación de DMG, en la que la Superintendencia reconoció a 193 mil 320 personas afectadas y derechos de acreedores por un billón 41 mil millones de pesos.

En total, han sido pagados 91 mil 969 millones y están pendientes por pagar 5.000 millones.

NOTA: La baja calidad del sonido de la entrevista obedece a dificultades técnicas debido a que el INPEC obligó a utilizar una plataforma de esa entidad, que no permitía grabación de la reunión, y negó la posibilidad de que fueran usadas la de La Nueva Prensa que había sido dispuesta con anticipación para este fin.

Preliminarmente, los contadores y abogados de Murcia Guzmán sostienen que están desaparecidos y mal gastados fondos y bienes estimados en al menos 41 mil millones de pesos.

David Murcia Guzmán se encuentra preso en una cárcel de Valledupar desde 2019 y lleva 15 años privado de la libertad. En Estados Unidos fue condenado por lavar US$2.2 millones. En Colombia tiene una condena a 20 años de cárcel por captación ilícita de dinero y lavado de activos.

Murcia ya fue aceptado para ejercer su derecho a hacer parte del proceso de liquidación de DMG y anunció que pronto dirá qué falta y qué sobra en las cuestionadas cuentas que lleva la Superintendencia.

Cuando fue intervenida, DMG no había entrado en cesación de pagos pero le fue impedida la posibilidad de saldar sus cuentas de manera inmediata y completa, lo que habría evitado el enredado, cuestionado e inconcluso proceso de liquidación actual  .

Un primer análisis forense de contabilidad de DMG, hecho por contables y abogados de Murcia Guzmán, indica que han sido despilfarrados y desaparecidos al menos 41 mil millones de pesos. También, dicen haber establecido la existencia de 38 mil documentos que no aparecen en la liquidación oficial de la Superintendencia de Sociedades.