Andrés Escobar, primer remiso comandante del Ejército Nacional

06 Febrero, 2024

Por GERMÁN NAVAS TALERO Y PABLO CEBALLOS NAVAS

Editor: Francisco Cristancho R.

Aterrados quedamos luego de ver un video grabado al interior de una guarnición militar en el Valle del Cauca, en la que se observa un destacamento siguiendo instrucciones de Andrés Escobar, fracasado empresario procesado por disparar a manifestantes durante el paro nacional y recientemente elegido concejal de Cali por el Centro Democrático. Provocado el rechazo y las voces de preocupación entre algunos ciudadanos, el comandante de la Tercera División emitió una declaración en la que aclaró que Escobar no participaba como civil ni como funcionario público, sino que acudía en calidad de responsable de un contrato suscrito entre este y el Ejército Nacional, que tenía por objeto la grabación de piezas publicitarias para el reclutamiento. Lo que convenientemente no aclaró el general Giovani Valencia Hurtado fue por qué aparecía, en plano cerrado y por varios segundos, el señor Escobar, así como tampoco explicó en qué capacidad se encontraba este individuo cuando impartía órdenes a la tropa bajo su comandancia. En lugar de ocupar su tiempo con tan bochornoso espectáculo, el general Valencia y el cabildante Escobar podrían haber aprovechado la oportunidad para regularizar la situación militar de este último, quien –según reportes de prensa– habría evadido la prestación del servicio militar obligatorio, al igual que el pago de la compensación en favor de las fuerzas militares en caso de que hubiera decidido rehusarse a la conscripción.

Tanto la presencia de Escobar en la Tercera División como el supuesto contrato que lo vincula con esta dependencia suscitan interrogantes que a buena hora formuló por escrito el secretario de transparencia de la Presidencia de la República, las cuales compartimos y por ello transcribimos a continuación: “¿Quién autorizó el ingreso del señor Andrés Escobar a las instalaciones de la Tercera Brigada del Ejército Nacional, Cantón Militar Pichincha? ¿A qué obedeció la visita del señor concejal Rafael Andrés Escobar? ¿Qué objetivo tenía dicha visita? ¿Por qué el señor Escobar estaba dando instrucciones al pelotón que se evidencia en las imágenes? ¿El señor Andrés Escobar qué instrucciones dio al pelotón? ¿El señor Andrés Escobar contó con autorización para grabar y divulgar imágenes? En caso afirmativo, ¿la institución a su cargo conocía el propósito de dicha divulgación? ¿Qué acciones adelanta esa institución, tendientes a aclarar los mencionados?”.

–Pasando a otro tema– En próximos días están llamados a reunirse los magistrados del Consejo Nacional Electoral para decidir la suerte de una acción judicial que pretende sancionar al partido Colombia Humana; a los responsables de la campaña Petro Presidente y eventualmente al presidente de la República por la presunta violación del tope de gasto, con ocasión de una donación que hiciera la Federación Colombiana de Educadores al partido y que se destinó a la vigilancia del escrutinio. Como lo han explicado varios abogados administrativistas y otros especialistas en derecho electoral, los dineros entregados por Fecode no se destinaron a la campaña del entonces aspirante a presidente Gustavo Petro, toda vez que se utilizaron cuando se había dado por concluida esta según el cronograma dispuesto por la Registraduría, disponible para consulta en internet por cualquier individuo de medianas capacidades e incluso para el fiscal Barbosa. Sabido es por todos que el escrutinio ocurre después de que se han cerrado los puestos de votación, mismos que para ser abiertos precisan que se haya terminado la campaña electoral de forma que no se intervenga en la decisión libre de los ciudadanos.

 

Esta postura ha sido prohijada por el Consejo Nacional Electoral en múltiples decisiones y es la razón por la cual los recursos destinados al proceso de escrutinio no son susceptibles de reconocimiento y posterior devolución a las campañas con cargo al presupuesto estatal. No obstante lo anterior, abusando del poder de indagación la Fiscalía General de la Nación adelantó un allanamiento a las oficinas del sindicato de maestros y sustrajo documentos propios de su actividad por la que –huelga recordar– ha sido objeto de todo tipo de persecuciones y estigmatizaciones. Si esto no es una ruptura institucional, ¿qué lo es?

Para el cierre y a guisa de recomendación cultural, destacamos el último episodio del podcast que dirige Mauricio Navas –pariente de los autores– y en el que recibió como invitada a la nueva superintendente de Industria y Comercio, Cielo Rusinque. Una conversación nutrida, lúcida y sensible que pueden escuchar en cualquier plataforma de streaming y en YouTube dando clic acá.

Adenda: con ocasión de acontecimientos recientes y tras adelantar una extensa investigación, estamos convencidos de que el príncipe azul es en realidad un tipo pálido y con apariencia de estirpe conservadora, quien por creerse parte de la nobleza se siente mandamás y por fuera de la órbita de la ley. Adivinen ustedes quién es el príncipe azul de los colombianos.

Adenda dos: jamás se le escuchó decir al procurador Mario Aramburo Restrepo que el presidente Carlos Lleras Restrepo fuera cómplice de delincuentes o representara una amenaza para las instituciones. Recordarán algunos que el doctor Aramburo tuvo que llamar la atención del jefe de Estado por su participación en política y lo hizo con el decoro y el respeto debidos a la magistratura y al individuo que la ocupaba. Era tal la altura de los involucrados que el procurador ofreció al presidente su renuncia y este no solo se rehusó a aceptarla, sino que asumió el regaño y enmendó su conducta. Cuánta falta hace un funcionario como Aramburo en la Procuraduría General de la Nación.